sábado, diciembre 02, 2006

Regalo de Navidad


Cuando identifiques algo malo en vos, no te entristezcas. Usalo para seguir adelante.
No pienses lo peor de vos, sino lo mejor porque estas en la proximidad del cambio. Celebrá. sin duda esto significa que hay más sensibilidad y más conciencia, cuando el caos pase,
esto ganado permanece...
No te castigues, premiate. Hace por vos aquello que hace tiempo no haces, busca un cariño grande para tu alma. Anda a aquel lugar, hace algo que te guste y dignifique.
No te preocupes por como puedan recordarte o reconocerte. Mirate a vos mismo con amor.
No busques afuera, anda a tu interior. Con más contacto interno, es posible darse cuenta donde se encuentra el alivio.
No reprimas el llanto, la angustia. Es el primer paso a la liberación.
No mires a esa sombra con descuido. Invitala a tomar un café y a que se muestre. Seguramente a esa parte tuya le falta amor.
No creas en su oscuridad. Eso que se muestra tan bloqueado y tan temido deja de serlo, en el momento que le arrojamos luz. Termina siendo tu parte más débil y que más necesita de tu afecto. Acercáselo, dale amor.
No te resistas. Esa parte nuestra necesita la osadía para liberarse. A menudo se pueden oír los gritos internos del alma… “yo estoy acá atrás”. Seguí la intuición aunque te cueste.
Y si sentis que no podes solo, que no encontras internamente la capacidad de perdonarte, de tratarte con cariño, de poder mirar el caos, de soportar el dolor...Entrega todo esto a Dios. Pedí la capacidad de perdón, de amor, de soporte. Reconocete carente y la bendición del universo comenzará a actuar con vos. "Pide y se te dará"

No hay comentarios.: